Quién Somos
Angelo Piovesan
Hay cosas que vivimos de niños y no nos damos cuenta, con la claridad necesaria, de lo que estaba pasando en aquel momento.
Por un lado, siempre fui un chico súper estudioso y aplicado, el mejor alumno de la clase, de pensamiento rápido y palabras que siempre fluían con claridad - se decía que estaba "enchufado a los 220v" ; devoraba toda la literatura, desde los libros de la biblioteca hasta las fotonovelas de mi tía, pasando por los libritos de bolsillo y los prospectos de medicina; y, por supuesto, los diccionarios, siempre me encantaron los diccionarios.
Por otro lado, siempre he amado la naturaleza y he estado en comunión con ella. Como me gustaba cuidar el huerto y los gallineros (sí, tenía un gallinero sólo para las gallinas paridas y los pollitos recién salidos del cascarón) era capaz de quedarme horas mirando al cielo e imaginando mil historias fantásticas, y otras muchas horas observando el movimiento de las hormigas e impidiendo, con un palo, que se comieran las verduras; decían que estaba desconectado, fuera del mundo, porque me llamaban y yo no contestaba - por supuesto estaba tan absorto que ni siquiera escuchaba. Experiencias tan diversas y paradójicas que parecían incongruentes, o vividas por personas diferentes; pero, sí, era yo, ¡y sigo siendo yo mismo!
Talvez esto explique los múltiples intereses, a lo largo de mi vida, por todo y por todos, y que me llevaron a los estudios académicos -a los 28 años ya era doctor por una de las mayores universidades americanas, con una tesis doctoral escrita en un idioma extranjero - y, al mismo tiempo, me llevaron a los estudios holísticos y esotéricos donde, además de los libros y los cursos, la búsqueda interior, la introspección y la meditación estuvieron siempre presentes. Las intuiciones, las premoniciones a menudo confirmadas, los dones espirituales, que creo que todos tenemos, se han ido presentando sutilmente y a veces imperceptiblemente a lo largo de mi vida.
He trabajado en radio y televisión, tanto comercial como educativa; he sido profesor universitario en la mayor universidad pública de Brasil y orientador de decenas de tesis de maestría y doctorado; consultor de la ONU en las áreas de comunicación, educación y salud; director de marketing promocional internacional, desarrollando acciones diversificadas en más de 30 países; entre otras cosas que son difíciles de mencionar aquí, es decir, viviendo todos los aspectos y valores de la ciencia académica.
Dedicándome siempre a proyectos sociales y al servicio de los demás, he tenido el privilegio de cuidar voluntariamente de ancianos y niños, y el cuidado de los niños siempre ha ocupado un lugar muy importante en mi corazón. Y, como buen canceriano, la familia es y ha sido siempre esencial en mi vida: mis tres hijos son las grandes bendiciones de esta existencia mía, a los que agradezco siempre e infinitamente el honor de ser su padre, y la alegría por los cuatro nietos que me han dado hasta ahora, con la esperanza de que lleguen otros, pues las posibilidades siempre existen.
Al mismo tiempo, siempre estuve inmerso en temas holísticos y esotéricos, tratando de entender cuáles eran las manifestaciones energéticas y cómo utilizarlas correctamente; buscando todas las formas disponibles para acceder a lo Divino, dentro y fuera de mí. Aunque tenía una sólida formación católica - incluso pensé en ser sacerdote, pero pronto desistí al ver que no tenía vocación para el celibato - me dediqué al estudio de diversas filosofías, religiones y tradiciones espirituales, desde el cristianismo hasta el islamismo, pasando por el budismo, el hinduismo, el shamanismo y la umbanda, entre muchas otras, ya que siempre me interesaron las múltiples formas de comunicación con lo Divino.
Me dediqué al estudio de la Teosofía, profundicé en el mundo de la Gran Hermandad Blanca, que trasciende las religiones, y me enamoré perdidamente de los Maestros Ascendidos. Me dediqué al estudio de diversas terapias holísticas, tratando de entenderlas, recibiendo tratamientos y aprendiendo a utilizarlas. También me dediqué al estudio y a la práctica de algunos oráculos, encontrando en el Tarot un instrumento maravilloso - soy tarologo desde 2003. Tuve el privilegio de participar en el movimiento de la Alquimia Interior, donde estudié, profundicé mi servicio, integré el núcleo interno, y más tarde ayudé a crear y fui el primer director de la Universidad de la Conciencia.
Todo junto y mezclado, buscando la Unidad en la expresión de la diversidad que soy. Siempre he estado inmerso en el interminable proceso de autoconocimiento que, he ido confirmando cada vez más intensamente, va de la mano, y muy estrechamente, con el proceso de expansión de la conciencia y la evolución espiritual.
La estructuración inicial y la evolución de la obra/servicios
Del Berkana Instituto a Angelo Piovesan
Me faltaban pocos años para jubilarme de la universidad cuando, no pudiendo resistir más a las llamadas internas, y bajo la inspiración del Plan Espiritual, fue urgente crear la estructura básica para realizar actividades de promoción del autoconocimiento, de la expansión de la conciencia y del desarrollo espiritual. En ese momento inicial, en torno al año 2010, todavía centrado en crear la infraestructura para los servicios que podía prestar, creé el Berkana Instituto.
La búsqueda del nombre del instituto pasó por algunos procesos, pero se resolvió cuando, aún sin haber estudiado nunca el oráculo de las runas, me encontré con la runa Berkana, que significa "del interior viene el real crecimiento". Esto me aportó la claridad de aquello en lo que siempre he creído y que da sentido al servicio que quiero prestar: ayudar a las personas en su proceso de autoconocimiento para que, conociéndose cada vez más profundamente, puedan encontrar la verdad que habita en sus corazones, despertar su conciencia, sus dones espirituales, comulgar con la Divinidad y, asumiendo la plena responsabilidad por sus propias vidas, vivir en plenitud con la alegría de ser lo que verdaderamente son.
En los primeros años de actividad, el Berkana Instituto ofrecía, siempre conmigo a la cabeza, pero en colaboración con profesionales especializados en diversas áreas, consultas individuales, presenciales y a distancia (online), cursos, talleres, conferencias, eventos gratuitos, siempre con el objetivo de ofrecer servicios de excelente calidad. Y, gracias al compromiso de todos, hemos tenido mucho éxito en este empeño. Sin embargo, con el paso de los años, la experiencia me ha demostrado que debería estar solo en este proceso, que cada uno tiene su misión en la vida, y que yo había creado la infraestructura para cumplir mi misión de servicio.
Poco a poco, de forma espontánea y armoniosa, la gente fue despidiéndose del instituto, dejando aún más claro que esa era mi misión. Al mismo tiempo, con la llegada de la pandemia de COVID, tuve que cerrar la casa grande donde funcionaba el instituto en la ciudad de São Paulo, y empecé a realizar las consultas individuales exclusivamente por internet, ya sea por videoconferencia o mediante audiodescripción.
Me tomé un descanso de las actividades presenciales y, cuando las retomé, fue en colaboración con espacios de amigos profesionales, a menudo en los extremos geográficos de la ciudad. En el año 2022, en un viaje de vacaciones para visitar a la familia, estuve en Marietta, una ciudad del área de Atlanta, capital del estado de Georgia, en Estados Unidos, y tuve la oportunidad de impartir Cursos de Reiki presenciales, y hacer consultas con el Tarot y el Tablero Radiónico del Fuego Sagrado.
De este modo, quedó aún más claro que el Berkana Instituto era en realidad yo, dondequiera que estuviera, en cualquier parte del mundo, utilizando cualquiera de las lenguas que domino. Así que, ante la realidad de los hechos, y desde el punto de vista de la identidad del trabajo, era necesario hacer esta integración: asumir, de forma clara e inequívoca, que los servicios, ya sean presenciales o a distancia, son prestados exclusivamente por mí.
Por eso, después de años, el website - que se llamaba berkanainstituto - tiene ahora mi propio nombre.