¿Cómo desarrollar la mediumnidad y hacer aflorar tus dones espirituales?

Cuando hablamos de desarrollo espiritual, implícitamente estamos hablando del desarrollo de los dones espirituales, o de la mediumnidad. Pero, al final, ¿qué es la mediumnidad? ¿Qué son y en qué consisten los dones mediúmnicos? ¿Cómo reconocer y aplicar estos "dones espirituales" en la vida cotidiana? ¿Cuál es su importancia? ¿Cómo se puede desarrollar la mediumnidad??

El Curso de Desarrollo Espiritual, con experiencias prácticas y sin vínculos religiosos, es ayudar a los estudiantes en el proceso inseparable de autoconocimiento y desarrollo espiritual.

El concepto "desarrollo espiritual" abarca muchos significados relacionados, como la expansión de la conciencia, la comunión con la Divinidad, el despertar de los dones espirituales o el desarrollo de la espiritualidad, entre otros.

¿Qué es la mediumnidad?

Antes de hablar sobre cómo desarrollar la mediumnidad, es necesario hablar un poco sobre ella, que es un tema tratado en diversos lugares del mundo, por diversas religiones y filosofías y de las formas más variadas.

La palabra mediumnidad, que viene del latín, tiene como raíz el significado de "intermediario" o "mediar", y la palabra médium tiene el significado de "aquel que está en el medio". Por lo tanto, un médium - una persona dotada de mediumnidad - tiene la capacidad extrafísica de hacerse de puente entre el mundo material y el mundo espiritual.

En otras palabras, y como enseñamos en nuestro Curso de Desarrollo Espiritual, la mediumnidad trata de la sensibilidad del ser humano a lo extrafísico, es la capacidad de nuestro cuerpo energético - nuestro cuerpo etérico (que contiene los chakras, meridianos, nadis, etc.) y todos nuestros cuerpos energéticos, que componen nuestra aura, o campo áurico - de captar, percibir e interactuar con otras energías de naturaleza no física.

Por esta razón, entre muchas otras, es esencial que nos comprometamos con el proceso de autoconocimiento, para llegar a conocer estas herramientas espirituales - nuestros chakras y cuerpos energéticos - de los que estamos compuestos, y que no pueden ser vistos por el ojo físico, para saber cómo funcionan, y cómo utilizarlos correcta y adecuadamente en el proceso de percepción y comunicación mediúmnica.

Algunas señales positivas de que la mediumnidad está despierta o lista para despertar son:

  • Intuición: cuando "sentimos" que tenemos que hacer, o no hacer, una determinada cosa, y después nos damos cuenta de que nuestra intuición era correcta;
  • Sueños reveladores: que pueden llevarnos a actitudes o acciones más adecuadas en nuestra vida.

Las definiciones más comunes indican que la mediumnidad consiste en la comunicación entre humanos y espíritus. Pero la mediumnidad es mucho más que hablar con los espíritus de los seres queridos que ya han fallecido. Así que cualquier persona interesada en saber cómo desarrollar la mediumnidad y el autoconocimiento necesita ser consciente de esto.

La Mediumnidad y el Espiritismo

No se puede hablar de cómo desarrollar la mediumnidad sin mencionar a Allan Kardec, porque gran parte del conocimiento que tenemos hoy sobre el Espiritismo fue organizado por él y por sus estudios y revelaciones provenientes del plano espiritual. Allan Kardec fue el responsable por la estructuración de la Doctrina Espírita.

Su verdadero nombre era Hippolyte Léon Denizard Rivail, profesor, científico e investigador que vivía en Francia y asistía - junto con nobles y otros intelectuales - a las reuniones mediúmnicas que tenían lugar en París a mediados del siglo XIX.

Se sabe que el profesor Rivail adoptó el nombre de Allan Kardec para que sus obras didácticas anteriores no se confundieran con las derivadas de sus estudios espiritistas. Pero tal vez la razón principal para adoptar el nombre fue la revelación, hecha por los espíritus, de que en una vida pasada había sido un sacerdote druida llamado Allan Kardec.

A la primera vista, cuando se habla de mediumnidad en Brasil, se piensa inmediatamente en Allan Kardec y en la Doctrina Espírita, ya que una de sus principales preocupaciones es la comprensión de la mediumnidad. Es tal vez la religión más importante para estudiar y enseñar sobre el tema, habiendo fundado la escuela de médiums según su doctrina.

Además del Espiritismo (o Kardecismo, como también se le llama), la mediumnidad también está muy presente en otras religiones, como la Umbanda y el Candomblé, donde desempeña un papel preponderante y de importancia.

Más allá de las doctrinas religiosas

La mediumnidad no tiene por qué estar vinculada a ninguna religión o doctrina. Es independiente del credo, de la etnia, de la localización geográfica o temporal, o del estatus social.

La mediumnidad es una capacidad de percepción que produce un fenómeno de atracción magnética y, como un imán, puede captar el campo áurico de personas - vivas o fallecidas, objetos y ambientes - físicos o espirituales.

El médium es un puente entre el plano físico y el plano espiritual y puede experimentar fenómenos que, aunque conocidos por la ciencia esotérica, muchos de ellos aún no han sido comprobados por la ciencia académica.

¡Todos somos médiums!

Sí, cada ser humano tiene la capacidad natural de percibir las energías sutiles de diferentes maneras y a diferentes niveles. Algunas personas tienen esta capacidad más desarrollada, otras menos, pero todos pueden desarrollarla más profunda y ampliamente.

Actualmente, la Doctrina Espírita habla de " educar la mediumnidad". La mediumnidad permite al ser humano, encarnado en su experiencia material, mantener su sintonía con la Fuente de la Vida, con la Divinidad que todo lo Es, y, integrado con el Uno, experimentar los detalles sutiles de la diversidad de la vida, ya sea en el plano material o espiritual.

Desarrollar la mediumnidad hace posible que el ser humano se comprenda cada vez más a sí mismo, sus emociones, pensamientos, palabras y acciones; que comprenda el Universo y todas sus expresiones; hace posible que comulgue cada vez más profundamente con la Divinidad y así expanda la conciencia y evolucione espiritualmente.

Desarrollar la mediumnidad implica una inmensa responsabilidad. Vivimos en un mundo material de polaridades, que nos obliga a elegir constantemente entre el bien y el mal. Cuando ejercemos nuestra mediumnidad, siempre tenemos que elegir entre utilizar nuestros dones espirituales para el bien o para el mal, y el resultado de esta elección siempre tiene que ser el bien de todos.

Los dones espirituales se manifiestan de distintas maneras

Hay muchas fuerzas energéticas que influyen en el mundo, en las personas, en los animales, en las cosas y en los ambientes. Muchas de estas energías emanan del mundo material o del llamado plano físico. Otras energías emanan del plano espiritual.

Para contactar y/o percibir estas energías, es necesario poseer - o desarrollar / educar - ciertas habilidades. Para eso, puedes aprender a desarrollar la mediumnidad.

La mediumnidad nos permite conectar estos dos mundos: el material y el espiritual. Nos permite sentir y percibir las energías de estos dos mundos, tanto las buenas como las malas o neutras. A veces, los médiums sienten la influencia de las energías con tanta fuerza que pueden experimentar síntomas físicos como bostezos, náuseas, palpitaciones, cansancio excesivo e incluso desmayos.

Si todos somos médiums, ¿por qué algunas personas son conscientes de sus dotes mediúmnicos y otras no, llegando a pensar, como la gran mayoría, que no tienen ninguna mediumnidad?

El hecho es que la mediumnidad de algunas personas es fácil y claramente identificable, ya que demuestran sus dones espirituales con mucha fluidez, como es el caso de los médiums que hacen psicografía y/o incorporación.

La psicografía es la transmisión de mensajes a través de textos o palabras. La incorporación se produce cuando el médium presta su cuerpo para que los espíritus puedan comunicase a través de la voz, de mensajes o de ideas que son transmitidas al médium.

Mediumnidad ostensible

Cuando las capacidades mediúmnicas son explícitamente demostradas, se dice que la persona es un médium ostensible o que tiene una mediumnidad ostensible.

Pero esto no significa que aquellos que no son médiums ostensibles, o que no consiguen demostrar o utilizar sus capacidades mediúmnicas, no tengan mediumnidad. Podría significar simplemente que estos dones aún no han despertado o que están bloqueados. Sin embargo, es perfectamente posible aprender a desarrollar la mediumnidad.

El adormecimiento y/o bloqueo de las capacidades puede ser el resultado de diversos factores, tanto internos como externos: la propia madurez personal y espiritual, el miedo, la inseguridad, el estrés, el exceso de juicios, entre otros.

Mediumnidad discreta

Cuando los médiums no son todavía capaces de demostrar ostentosamente su mediumnidad, se dice que son médiums discretos, o que tienen una mediumnidad discreta.

En la medida en que trabaje sobre sí mismo, en la medida en que se comprometa responsablemente en el proceso de autoconocimiento, en la medida en que se libere de sus bloqueos y limitaciones, en la medida en que se abra cada vez más amorosamente a las experiencias del plano espiritual, sus dones mediúmnicos emergerán y se presentarán cada vez con más fuerza.

De este modo, no sólo el medium se percibe internamente como tal, sino que las personas de su círculo también llegan a reconocerle como médium.

Mientras aprendes a desarrollar la mediumnidad, también aumentas tu comprensión del mundo espiritual y material. Además, conocerás, identificarás y percibirás cada vez mejor las energías con las que interactúas, ya sean buenas o malas.

Prácticas complementarias que ayudan al desarrollo espiritual

Tanto los médiums discretos como los ostensibles deben aprender a desarrollar su mediumnidad y perfeccionar sus habilidades mediante el estudio y la práctica de forma seria y responsable, con el objetivo de servir al prójimo y al bien común.

En todos los casos y en todas las circunstancias, la meditación es una forma maravillosa, tal vez la más importante y eficaz, de sentir y percibir las energías y establecer una interacción más armoniosa y consciente con el mundo físico y espiritual.

No obstante, la meditación necesita ir acompañada de ciertas prácticas que establezcan o refuercen la conexión con los mundos físico y espiritual, como el Yoga y el Tai-Chi-Chuan, entre muchas otras, incluyendo actividades físicas básicas como estiramientos y el fortalecimiento muscular..

Además, es necesario establecerse en un estilo de vida que busque la pureza de los cuerpos físico, emocional y mental, evitando la ingestión de productos tóxicos y y adoptando una alimentación sana y natural.

Otro aspecto extremadamente importante en el proceso de desarrollo mediúmnico, o de perfeccionamiento de la expresión de los dones mediúmnicos, es contar con la orientación de personas más experimentadas.

No hay que tener miedo, porque la mediumnidad establece un proceso de colaboración en el que los médiums colaboran con el plano espiritual comunicándose con los espíritus, y los espíritus colaboran con el plano material comunicándose con los médiums.

Los principales tipos de mediums

Antes de hablar de cualquiera de las manifestaciones más importantes - o conocidas - de la mediumnidad, es bueno abordar dos expresiones genéricas muy comunes.

Médiums sensibles o impresionables

Son personas que sienten la presencia de energías espirituales a través de una ligera impresión.

Esta capacidad se desarrolla poco a poco a través de la frecuencia con la que se produce, convirtiéndose en un hábito. En este tipo de mediumnidad, el médium puede reconocer tanto la buena como la mala naturaleza de las energías con las que entra en contacto y puede incluso identificar sus características específicas.

Médiums de presentimientos

Un presentimiento, también llamado premonición, es una intuición difusa de lo que está por venir. Muchas personas tienen esta capacidad, más o menos desarrollada.

Puede significar que la persona tiene "doble visión" y puede prever las consecuencias de los acontecimientos actuales. Sin embargo, el presentimiento también puede ser el resultado de una comunicación con el plano espiritual, y la mediumnidad del presentimiento es una variedad de la mediumnidad de inspiración.

Los diversos tipos de mediumnidad

A continuación hablaremos de los tipos de mediumnidad más conocidos.

1. Telepatía o mediumnidad de inspiración

El espíritu transmite palabras y/o ideas y el médium puede influir en la retransmisión.

Puede parecer mistificación porque el médium utiliza sus propias palabras y puede cometer errores de concordancia. Las ideas pertenecen al espíritu, las palabras pronunciadas pertenecen al médium.

2. Mediumnidad de efectos físicos

Este es uno de los tipos de mediumnidad que puede ser subdividido en grupos:

  • Los facultativos o conscientes: son los médiums que tienen conciencia de lo que hacen;
  • Los involuntarios o naturales o inconscientes: médiums que no tienen conciencia de lo que hacen y que pueden ser utilizados por los espíritus para hacer manifestaciones sin saberlo;
  • Los semiconscientes: que tienen conciencia de algunas de las cosas que ocurren en la manifestación mediúmnica, pero no de todo.

3. Mediumnidad de incorporación

Muchas personas interesadas en aprender a desarrollar su mediumnidad sienten una gran fascinación por este tipo de don mediúmnico.

La incorporación se produce cuando el espíritu se incorpora en el médium, pudiendo alcanzar todo el cuerpo o partes de él y llegar a todos los chakras. También puede subdividirse en grupos:

  • Incorporación consciente: el médium es plenamente consciente de lo que ocurre. El 80% de los médiums incorporadores son conscientes;
  • Incorporación semiconsciente: el médium es consciente de parte de lo que ocurre;
  • Incorporación inconsciente (rara): el médium no es consciente de lo que está ocurriendo, donde el espíritu cubre completamente la consciencia del médium, como si estuviera dormido.

Un tipo especial de mediumnidad de incorporación es la mediumnidad de transporte. En este caso, el médium incorporador tiene la capacidad de incorporar sus propios espíritus guías/mentores y también otras entidades que no son sus mentores.

Un punto importante a destacar es que los médiums parlantes no necesariamente tienen que incorporar.

4. Mediumnidad psicográfica

En la psicografía, la comunicación tiene lugar a través de la escrita y también se subdivide en grupos:

  • Mecánica: el médium no es consciente de lo que escribe y no tiene control sobre su propia mano, escribiendo con la letra del espíritu sin ninguna influencia de sus pensamientos. En este caso, el espíritu se expresa con mayor claridad;
  • Semimecánica: el médium influye en la comunicación del espíritu con sus pensamientos. Los médiums semi-mecánicos constituyen la mayoría de los psicógrafos;
  • Intuitivo: el médium tiene una intuición sobre lo que debe escribir, recibiendo la idea del espíritu, interpretándola y desarrollándola de acuerdo con sus propias posibilidades socioculturales e intelectuales;
  • Oyente: el médium escucha conscientemente lo que dice el espíritu y lo transcribe de su puño y letra.

5. Mediumnidad pictográfica

Es uno de los tipos de mediumnidad más interesantes. Se refiere al campo de las imágenes: dibujos, pinturas y esculturas. El médium es capaz de transmitir el mensaje del espíritu a través de imágenes. También puede denominarse pintura mediúmnica.

Este tipo de mediumnidad también se subdivide en los mismos grupos que la psicografía: (mecánica, semi-mecánica e intuitiva), con el añadido de la mediumnidad visual, cuando el médium ve la imagen que va a transmitir.

Muchos artistas - no sólo pintores, diseñadores y escultores, sino también músicos y escritores - son médiums inspirados.

6. Mediumnidad de psicofonía

La psicofonía es un tipo de mediumnidad que se produce cuando el médium incorpora la voz del espíritu a su sistema fonético. Las ideas, el contenido y las palabras pertenecen al espíritu, que controla los órganos vocales del médium.

No es raro que los hombres incorporen voces femeninas y que las mujeres incorporen voces masculinas, lo que afecta drásticamente al sistema vocal del médium.

7. Mediumnidad vidente y clarividente

En este tipo de mediumnidad, el médium tiene la capacidad de ver espíritus, escenas u otras imágenes del plano espiritual.

Es importante destacar que, en la absoluta mayoría de los casos, el médium que aprende a desarrollar este tipo de mediumnidad no ve con sus ojos físicos, sino que ve la imagen que se forma en su mente, es decir, es el alma la que ve. Por eso los videntes pueden ver tanto con los ojos abiertos como cerrados. La clarividencia en el ojo físico es muy rara.

La clarividencia es el don de ver con claridad determinadas situaciones, seres y objetos, sin limitación de tiempo o espacio (puede ser en el otro lado del mundo, en otro mundo y en otro tiempo) sin utilizar los cinco sentidos físicos.

El médium clarividente puede percibir la realidad en niveles mucho más amplios y complejos, desde la perspectiva del plano espiritual.

Como dijo Allan Kardec:

Los clarividentes son individuos dotados de algún conocimiento que no les es propio, sino que procede de existencias anteriores y de los espíritus con los que se comunican, a menudo a través de los sueños."

8. Mediumnidad auditiva y clariaudiente

Los médiums oyentes o clariaudientes son aquellos que tienen la capacidad de oír la voz de los espíritus.

Este fenómeno puede manifestarse como una voz interior o como una voz exterior, como si fuera la de una persona viva. Esta capacidad permite al médium conversar con los espíritus.

9. Mediumnidad de sanación

Este tipo de mediumnidad ocurre cuando el médium tiene el don de curar por el simple toque de sus manos, por su mirada, por un gestual, sin el uso de cualquier medicamento.

Cuando el médium no está incorporando, para potenciar su poder de curación, puede utilizar algunas técnicas de curación conocidas como Reiki, Curación Pránica, Magnified Healing, Theta Healing, puede utilizar hierbas y aromas, limpiar y equilibrar los chakras, entre muchas otras.

Cuando el médium es de incorporación, son sus guías espirituales, sus mentores espirituales, los que determinan el proceso de sanación.

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10. Mediumnidad de demanda

La demanda espiritual es el resultado de la emanación de energías negativas - generadas por los sentimientos, pensamientos, palabras y acciones negativas de los demás - que pueden dirigirse a una persona concreta, o a un determinado grupo de personas, por ejemplo, una familia.

Existen varios tipos de demandas espirituales y cada una actúa de forma diferente en la vida de la víctima, requiriendo cuidados específicos.

Este tipo de mediumnidad es característica de los líderes espirituales, porque todos ellos, pero no sólo ellos, tienen los dones espirituales de:

  • Desmantelar demandas o magias;
  • Limpiar de magias;
  • Desarrollar la mediumnidad de otras personas.

Otros tipos de mediumnidad

Existen otros tipos de dones mediúmnicos. Cuanto más estudies cómo desarrollar la mediumnidad y cuanto más la practiques, más ampliarás tu capacidad de percepción y comunicación con el plano espiritual.

Pero vale la pena destacar otros tres tipos, aunque ocurran con menos frecuencia:

  • Mediumnidad olfativa: es cuando el médium tiene la capacidad de percibir olores que no están en el ambiente y comprender los mensajes relacionados con esos olores;
  • Mediumnidad gustativa: es cuando el médium se comunica a través del paladar, a través de los sabores que siente;
  • Mediumnidad de xenoglosia (muy rara y rodeada de tabúes): es cuando el médium tiene la capacidad de hablar en lenguas extrañas e incluso desconocidas.

¿Qué se entiende por Mediumnidad Espiritual?

Allan Kardec decía que todos los seres humanos tienen la capacidad, aunque aún no estén desarrolladas, de percibir y comunicarse con el plano espiritual y recibir la influencia de los espíritus. También dijo que esta influencia muchas veces es mucho mayor de lo que uno pueda imaginar, pues es común que los espíritus guíen y dirijan nuestra vida.

Dijo que cualquiera puede ser médium espiritual, es decir, aprender a desarrollar la mediumnidad y el autoconocimiento, pero que, para ello, era necesario demostrar interacción con el plano espiritual a través de lo que llamó, “efectos patentados con una cierta intensidad”, que son independientes de la fe o de la religión.

Para Kardec, tales efectos – o dones, o habilidades, o capacidades – son, principalmente, cuatro, como ya vimos anteriormente: psicofonía, psicografía, clariaudiencia y clarividencia.

Consideraciones finales

Ciertamente, este artículo no pretende agotar todo lo que hay que decir sobre cómo desarrollar la mediumnidad y las diversas habilidades mediúmnicas.

El conocimiento sobre el tema se expande y, al mismo tiempo, se profundiza a medida que conocemos y aplicamos nuestros dones espirituales para servir a la humanidad, para servir a otros seres humanos, a los animales, para cuidar amorosamente y conscientemente del medio ambiente que nos rodea, de nuestro planeta.

Como ya hemos dicho: todos somos médiums, todos tenemos diversos dones mediúmnicos y – ciertamente – tenemos la responsabilidad de desarrollarlos, de educarlos para que podamos utilizarlos con cada vez mayor maestría y con gran respeto y sabiduría.

Ahora que puedes comprender mejor la importancia de expandir la consciencia y el autoconocimiento, aprovecha para conocer nuestro Curso de Desarrollo Espiritual. Enseñaremos, entre otras cosas, cómo desarrollar la mediumnidad y cómo utilizar tus dones espirituales para beneficiar a los demás. ¡Únete a nosotros!

Que la luz del amor sea la guía en todos los caminos, en todo momento, en todas las situaciones, con todas las personas. ¡Y que el Amor nos lleve a la Paz!


DATOS BIBLIOGRAFICOS

Kardec, Allan, 1804-1869. O livro dos espíritos / prefaciado por Hermínio Miranda Allan Kardec ; [tradução Sandra Keppler]. — 6. ed. — São Paulo : Mundo Maior Editora, 2012.

Kardec, Allan, 1804-1869. O livro dos médiuns, ou, Guia dos médiuns e dos evocadores: espiritismo experimental / Allan Kardec; [tradução de Guillon Ribeiro da 49.ed. francesa]. 71. ed. – Rio de Janeiro: Federação Espírita Brasileira, 2003.

Site da Federação Espírita Brasileira: www.febnet.org.br

Site da Sociedade Brasileira de Estudos Espíritas: www.sbee.org.br